La izquierda Argentina presentó un proyecto para disolver la unidad de espías de la Policía Federal

A 28 años de la voladura de la sede mutual judía AMIA, y en medio de las repercusiones sobre la aclamada serie Iosi, la diputada nacional del Frente de Izquierda Myriam Bregman, presentó hoy un proyecto de ley para disolver el Cuerpo de Informaciones de la Policía Federal Argentina (PFA).

La serie Iosi: el espía arrepentido, inspirada en el libro coescrito por Horacio Lutzky y Miriam Lewin, está basada en los testimonios de José Alberto Pérez, un agente de la Policía Federal infiltrado en 1986 y por varios años en organizaciones de la colectividad judía, donde recabó información sensible que, de acuerdo a una hipótesis, pudo haber sido utilizada para perpetrar el atentado a la AMIA.

"Nos proponemos terminar con toda normativa secreta heredada de dictaduras pasadas pero que conservan su vigencia y, lo que es más grave, que permiten que continúen funcionando los organismos cuyo fin exclusivo es el espionaje político", sostuvo Bregman.

El proyecto en cuestión, que también lleva la firma de los diputados Nicolás del Caño, Alejandro Vilca y Romina del Plá, plantea la derogación del decreto 2075/58, que creó el Cuerpo de Auxiliares de la Policía Federal, y del decreto ley 9.021/63 que instituye el Cuerpo de Informaciones (y su decreto reglamentario 2.322/67).

"Proponemos disolver el cuerpo de espías que posee la Policía Federal Argentina y permitir que los organismos de derechos humanos tengan acceso a esa información, así como permitir que las víctimas del espionaje político puedan acceder a aquella información en tanto se vean mencionados en ella", precisó la diputada del PTS.

Según señaló Bregman, el cuerpo de informaciones de la Policía Federal agruparía a unos mil espías conocidos en el ambiente como "Plumas", y cuyo accionar no está sometidos a ningún tipo de control.

Un caso recordado más allá del de Iosi es el de Américo Balbuena, un policía federal infiltrado durante 11 años en medios de comunicación alternativos como la Agencia Walsh y FM La Tribu. Desde esos medios obtenía de primera mano información sobre las actividades y protestas de organizaciones políticas, sociales y sindicales. 

Ese caso se encuentra a la espera de juicio oral en la justicia federal, según indicó Bregman, que es abogada querellante en la causa.